A la tierra y al microclima de una parcela especial, O Condiño, que hacen que lo conocido sorprenda.

El más actual y tradicional de nuestros vinos, máxima expresión de los vinos blancos de la Ribeira Sacra.

Tras recuperar la variedad y adaptarla con éxito en una finca de pizarras a orillas del Río Miño, en la Ribeira Sacra más septentrional, en Ponte da Boga hemos elaborado el primer monovarietal de Blanco Lexítimo de la Denominación de Origen.

Fresco y serio, así es nuestro capricho. La mejor versión de un Godello, donde el estilo alegre y juvenil, se envuelve en el hábito de la seriedad y complejidad que proporciona el tiempo.

La mejor representación del potencial de la reina de Ribeira Sacra, la uva Mencía, cuidada con esmero por sus viticultores.

El suelo pizarroso de la finca San Vitorio, en la ribera del río Miño, conduce a este vino hacia las especias, los frutos negros y el regaliz. El suelo de esquistos en las parcelas de los ríos Sil y Bibei acompañan su viaje con frutos rojos y flores.

La recuperación de dos viñedos excepcionales y únicos: Miño y Sil; pizarra y esquisto. La expresión de nuestra Mencía más especial tras su paso por barrica.

Sólo de un terroir único como el del viñedo de Alais podía nacer un vino tan apasionantemente diferente, donde finura e intensidad dan lugar a nuestro Capricho.

Fresco, vibrante, potente y elegante, así es nuestro otro capricho: el de Sousón. Un singular vino monovarietal que nace de nuestras mejores parcelas para expresar toda la personalidad de una variedad que reclama protagonismo.

En el vertiginoso terreno de la finca Porto de Lobos, recuperamos el cultivo de la variedad Brancellao, que da lugar a un vino con carácter atlántico, fresco y potente.

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